El resultado va a ser nulo. Los que hasta ahora creen que fue un suicidio van a tener una prueba a la que calificarán como irrefutable. Los que dicen que lo mataron negarán la cámara, negarán lo filmado y seguirán creyendo que lo mataron. Y que la que dio la orden fue la mismísima Cristina.
Obviamente la marcha del #18F se hará igual.
No es Nisman la cuestión. Tampoco es conocer la verdad. Ni siquiera que se haga justicia. Están jugando como si estuviésemos en tiempo adicionado en un partido de fútbol. A todo o nada.
Vienen por Cristina. Vienen por todo.
PS: ¿No les llama la atención que todavía no hayan soltado a la cancha a los constitucionalistas "de fuste" para todo servicio del Grupo Clarín (Félix Loñ, Daniel Sabsay, o el "todo-denunciante" Monner Sans) para respaldar la denuncia de Nisman a Cristina? Esa es la mejor prueba que la denuncia es la nada misma. Si tuviese algo estos no pararían de girar por los canales las 24 horas.
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