"El mismo partido que privatizó la empresa ahora la quiere estatizar", te gritan desde la vereda de enfrente los que están excentos de contradicciones y toda su vida han llevado adelante una ética, y cómo que no también una estética, que no les permite ir de un lado a otro estando condenados a la inmovilidad.
Pero más allá que esto sea una inifensiva chicana que pretende menoscabar el espíritu de cada uno de los militantes del campo popular, veamos lo que ocurre en los lugares donde la gente de los países serios sí está excenta de las contradicciones tercermundistas.
Decía el compañero Rajoy en 2008: Tras calificar de "inmoral y lamentable" la venta del suministro de energía, gas y petróleo en España a los "rusos", quiso dejar "claro" que no aceptará lo que, a su juicio, "nos convierte en un país de quinta división por no decir en el más atrasado del mundo" e ironizó sobre lo "notable" que resulta en contraste con el resto de estados que integran la UE, donde se aboga por una reforma energética "precisamente para no depender de fuera". Nota completa.
Yo creo que a esta altura la rama ortodoxa del P.P. está pidiendo su expulsión.
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