Asistimos sin cargo a una tremenda clase de anti-historia del compañero vanrrelista Bigote Acosta en sobre la llegada de Colón a las ligas mayores de fútbol argentino. Nada para desperdiciar.
Parece que Evita hizo un DNU por el cual le dijo al ministro Ramón Cereijo que lo ponga a Colón en la A, pero como este era más racional que ella solamente lo puso en la B. Debe haber sido bien picante, bien pulenta, este Cereijo como para desobedecer a Evita, ¿no?, sobre todo a un DNU que -más allá que en aquella época no existían- habría que preguntarse desde dónde los dictaba Evita. ¿Desde la Fundación?
Después, como si nada, salta unos años para ir a la llegada de los uruguayos que traen la marcha sabalera y viene el ascenso de 1965. Un desequilibrio mental al que sólo se llega luego de la euforia post campeonato.
Sobre las cuestiones políticas de la charla con Kiko Busatto destacamos su emoción, que logra contener pero no tanto y llega al llanto, y la idea de la unidad en la diversidad.
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