10/6/12

El juego de las diferencias

Hubo un tiempo en que Néstor fue un papanatas que no hacía más que ocultar a quien verdaderamente ejercía el mando, es decir Cristina.
Una vez que es electa Cristina, pasamos a un estadio histórico superior, y todos escuchamos que el verdadero poder en las sombras era ejecido por Néstor.
Finalmente, ya cansados de que sus teorías no cierren por ningún lado y que la realidad los deje como tontos, optaron por decir que los dos eran la misma mierda.

Asistimos por estos días a una nueva etapa que nos intenta contar nuestra historia reciente de la misma manera, es decir, sin entender lo que está pasando, asignando un nuevo rol a los mismos protagonistas. Algunos sostienen que el surgimiento de esta nueva forma de leer la historia sólo puede ser comparada con la aparición de lo que fue el materialismo histórico.

Aprendamos de estas respuestas:
- ¿No son lo mismo? 
- No. Cristina lo que de alguna manera hace es poner en evidencia que Néstor murió. Aunque la retórica indica que es una continuidad, un mismo proyecto con dos gobiernos, pero son dos proyectos totalmente diferentes. ¿Por qué? Néstor nunca compró la mercadería que vendía. Cristina sí. 

- ¿Cómo es eso? 
- Néstor tenía el pragmatismo de saber qué decir, qué enarbolar y qué mística plantear, sabiendo que el manejo del país está basado en la concentración de poder y de caja. Por ejemplo, y reconociendo las cosas que se hicieron bien, y hasta muy bien, si alguien dice que quiere activar la política productiva nacional, perfecto, pero Néstor jamás aisló a la Argentina del mundo. Hablaba que la iba a aislar pero no la aislaba. Los corría a todos pero con todos terminaba negociando. Apretaba lo suficiente como para que vengan al pie y entreguen lo que tienen que entregar.

Leamos completo para ver por dónde vienen estos muchachos ahora, y sin descontextualizar, al Rabino Bergman.

3 comentarios:

La Corriente Kirchnerista de Santa Fe dijo...

Era más interesante éste cuando competía con los aforismos de Narosky, y el macrismo cuando era nada más que globos y Durán Barba, sin "intelectuales" que le aportaran ideas.

Daniel dijo...

Un genio Néstor. Pidamos a los gritos que vuelva y la encierre a esta chiruza.
Una luminaria como el rabino Bergman no puede ser desoída.

ram dijo...

Daniel, no joda, ¿Cómo va a volver, si está muy cómodo en esa isla del Caribe, prendiendo habanos con billetes de 100 dólares?.
La miserabilidad garca ni siquiera respeta los muertos (cosa que les convendría, aunque más no sea por superstición y viendo cómo les va)