La Franja Morada y Cavalieri

En el año 84 u 85 Armando Cavalieri hizo reformar el estatuto de la Federación de Empleados de Comercio, y propuso también un cambio en el nombre: Pasó a llamarse entonces Federación Argentina de Empleados de Comercio y Servicios. En la CGT muchos lo tomaron hasta como una cuestión pintoresca de Don Armando. En una palabra, no lo vieron venir.

Este simple cambio de nombre le permitió a Cavalieri afiliar a su sindicato a cuanto trabajador prestase un servicio, sin importar la empresa en la que trabajase, lo que le permitió incrementar su caudal de afiliados, lo que trajo también mayores ingresos a la federación.

Trabajadores telefónicos, camioneros, de la construcción o metalúrgicos eran afiliados en complicidad con las patronales, a las que les convenía esto ya que el salario que tenían que pagar a sus trabajadores por el convenio vigente con el Sindicato de Comercio era mucho menor que el de los otros sindicatos.

Cuando los otros gremios advirtieron esta maniobra comenzaron a trabajar para recuperar a esos afiliados y hasta el día de hoy vemos cada tanto como trabajadores encuadrados en Comercio piden pasarse a Camioneros, lo que en los medios se refleja como un "apriete de Moyano".

En el día de ayer la asamblea del Centro de Estudiantes de la Facultad de Derecho de la UNL, conducido por la agrupación estudiantil Franja Morada, aprobó el cambio de nombre del centro para pasar a llamarse CENTRO DE ESTUDIATES DE DERECHO Y CIENCIAS SOCIALES.

El objetivo confesado desde la Franja Morada es contener en su seno a los estudiantes de la carrera de Licenciatura en Trabajo Social, que recientemente se integró a la Universidad, y cuyo centro de estudiantes nunca pudo ser controlado por la Franja Morada.

Los estudiantes de Trabajo Social rechazaron esta intromisión y decidieron tomar la Facultad de Derecho, sin impedir el dictado de clases.

Aquel viejo ejemplo del camino que marcara Don Armando Cavalieri hoy es reivindicado, homenajeado y seguido por los jóvenes democráticos y republicanos de la Franja Morada.

¡Felicitaciones! ¡Y qué sigan los éxitos del radicalismo!