11/5/10

Chereky, un periodista santafesino sin miedo

Es verdad que en Santa Fe hay pocos lugares donde expresarse.
Es verdad que algunos periodistas han dejado medios para dedicarse a otras cuestiones, como también es verdad que han desaparecido algunos medios en los que más que empleados, se sentían contenidos.
Tal fue el caso de la revista "El Tablón", que fuera editada en la capital de la provincia y se dedicaba al deporte de la ciudad.

El pico de popularidad de esta publicación llegó sobre el final del siglo pasado. Era el ultimo clásico entre Colón y Unión del milenio y llegaban empatados en cantidad de partidos ganados uno sobre otro. Como el ganador fue Unión, la tapa -de dudoso ingenio- fue "Papá del Siglo".


¿Te das cuenta? ¿Por un clásico nos tuvimos que comer esa tapa?

El responsable ideológico fue Claudio Cherep (Chereky, le decía cariñosamente un empresario periodístico lleno de sensibilidad como
Juan Honofre Amarilla) y al día de hoy no ha podido levantar ese muerto.

Varios amigos tuvimos que evitar -con todo el dolor del alma- que lo caguen a bollos por esa tapa de mierda de fines del siglo pasado.


El odio hacia Cherep llega hasta estos días, como lo demuestra la iniciativa de Keka Koffman (una de las Madres de santafesinas) que tenía todo listo para hacerle un juicio público por complicidad con la causa tatengue.

- Escucheme Keka ¿Desde cuándo le gusta el fútbol a Ud.? ¿Es sabalera por lo menos?

- No nene. No tengo ni idea. Yo le dije al Negro Luna que me tire un nombre para hacer algo contra los periodistas Gorilas, y me dio el nombre de este pelotudo.


Dos horas y media nos llevó convencerla para que desistiera y explicarle que, si bien sobraban motivos para fajarlo, no era necesario llegar al extremo de exponerlo tanto.


Convencimos a la Keka y al Negro Luna, pero se ve que la idea le quedó en la cabeza. (No es descabellado pensar en este episodio -que pudimos abortar- como un antecedente de lo que tiempo después, y con otros personajes, hiciera la Hebe en Plaza de Mayo).

Después se lo contamos a él, como para que vaya viendo la posibilidad, no te digo YA, pero cuando encuentre algún flanco, de hacer algo así para que la monada sabalera tuviese por lo menos un archivo con lo que de vez en cuando empapelar la ciudad para burlarse del tatengaje.

- ¿Me vinieron a apretar?, perguntó el Turco.

- No turquito, si sos un amigo, le dijimos casi a trío con el Pêru y Yayo, dos reputados sabaleros.

- Lo que te queremos explicar...

- Nada. Se van a la mierda todos. Yo soy periodista y me la banco porque tengo huevos. Si hasta trabajé en LT 10.

Como vio que nos quedamos callados, se envalentonó y copó la parada

- Les digo más: Yo voy a hacer la próxima pegatina.

Nos fuimos desilusionados y amargados porque nuestro amigo había entendido mal, pero con la esperanza que cuando se le pasase la calentura iba a entender bien nuestro mensaje.

Pifiamos el prnóstico. Eso no pasó.
Y si bien no hizo la pegatina con la que amenazó, desde ese día va a todos (*) los lugares glorificando su tarea de periodista.

Vaya este humilde homenaje a mi amigo el Turco, viendo a tanto salame decir que tiene miedo. Él se banca esa vergonzosa tapa, mucho más aún cuando nadie se la recuerda.


(*) Cuando digo TODOS LOS LUGARES, es efectivamente eso y no otra cosa.
La foto (por 'laevelín') que ilustra este post, fue tomada en una marcha de Asistentes Sociales en contra de uso de esperma de ballenas en productos cosméticos. Y ahí estaba el tipo con su más famosa tapa.

No hay comentarios: