No me gustó este afiche. Si lo pegó uno de los nuestros, me parece que se mandó una cagada. Si, tal como sugirió Orlando Barone, lo pegaron ellos, está clarito que le salió muy bien. Tan bien que hasta los nuestros tuvieron que salir a despegar la marcha en favor de la Ley de Medios de ese afiche.
Los que aparecen en el afiche lo ningunearon o hicieron comentarios muy livianitos, excepto uno que se mandó una editorial muy buena en su programa y hasta hizo un análisis del periodismo, y del momento político que da para reproducir, a la vez que marcar las cosas con las que no coincido.
Marcelo Zlotogwiazda en su programa de radio Mitre, "La Otra Pata":
Quiero hablar de periodismo en general. Hay una sección, en realidad no es una sección, es como un boletín en los estados unidos de un centro de estudios, de un centro de investigación en política y economía, que se llama "Centro de Investigación en Política y Economía", que son básicamente economistas, sociólogos y politólogos que apoyan al sector, si se quiere, más de izquierda del partido Demócrata. Son lo que en EEUU se llama 'liberals'. Gente progre, si se quiere.
Uno de esos economistas se llama Dean Baker pubica hace varios años una sección que se llama "Beat The Press". Y es interesante el título: ¿Por qué? Porque Beat en inglés significa varias cosas. Beat es golpear, o sea puede ser golpear a la prensa. Beat es el pulso, o sea podría ser, tomarle el pulso de la prensa. Y beat también es Vencer, o sea podría ser el título también vencer, ganarle a la prensa.
¿De qué trata esa sección? Este Dean Baker desmenuza algún artículo, siempre lo hace con prensa gráfica. No, también lo hace con radio ahora que recuerdo; no se si con televisión. ¿Y qué es lo que hace? Desmenuza un artículo y lo cuestiona. Nuestra lo que, desde su punto de vista, son errores, equivocaciones, falsos enfoques, falacias, sofismas, y no se la toma con cualquiera. Se la toma con los principales medios, con la prensa dominante. Siempre hay desmenuzamiento sobre Washington Post, New York Time, Wall Street Journal , las radios más importantes, desde una posición crítica hacia una visión de esos medios generalemente compaciente con, si se quiere, algún poder.
Ahora, la particularidad de esa sección, ese boletín -Beat The Press- es que hay argumento. Nunca hay descalificación a ninguno de los autores de los artículos. Siempre son argumentos. Con más o menos ironía, argumentos y contra-argumentos y fundamenta.Algo de eso, algo de eso, de un año y pico a esta parte, está sucediendo en la Argentina, ¿no? Se está cuestionando la manera en cómo se hace periodismo.
Desde, tal vez será, la discusión por la ley de medios, hay, está sobre la mesa, puesto en debate el ejercicio del periodismo. Y creo que hay, en general, una lectura, desde el consumidor, el lector, el televidente, del oyente menos ingenua de lo que es el periodismo, y me parece bien, como ese, esta parte del proceso. ¿Por qué? Porque se nos está bajando del pedestal, se nos está desidealizando como en alguna época estuvo una parte considerable del periodismo.
Hasta ahí todo bien.
Para mí también todo bien. Salvo que si para hacer una crítica de cualquier tema es necesario ser economista, sociólogo o politólogo, somos varios los que quedamos afuera. Pero a lo mejor a esto lo digo de puro susceptible, porque vos no dijiste eso.
Ahora lamentablemente esto que viene ocurriendo, y que yo creo que tiene estas consecuencias positivas, viene acompañado de varias otras cosas. Viene acompañado de: Creciente hostilidad hacia la prensa en general, pero en particular hacia periodistas; viene con ensañamiento; viene con descalificación, viene con estigmatización, viene con sospecha. Y ha habido hechos. El cartel es el último. Ya me voy a referir hacia el final al cartel.
Claro que coincido en que tiene consecuencias positivas, entre ellas que mucha gente se ha dado cuenta que cuando alguien pública o dice algo, no necesariamente tiene que ver con que ESO SEA NOTICIA. Y peor aún, se hace cada día más evidente que cuando dicen algo lo hacen DEFENDIENDO ALGO, o A FAVOR DE ALGO y no porque tal o cual medida del gobierno les parezca mala. Y ese ALGO la mayoría de las veces no tiene que ver con ideas (que, por si es necesario aclaro, cualquiera puede tener la idea que le venga en ganas) y sí tiene que ver con intereses económicos de los dueños de los medios.
A ver, el viernes pasado, por no hacer la lista más larga. El viernes pasado en una movilización organizada por 678, transmitida por 678, aparecieron carteles con agresiones a un gran amigo mío, uno de mis mejores amigos, Ernesto Tenembaum, María Laura Santillán, un gran periodista como Nelson Castro y un cartel agresivo hacia Martín Caparrós, donde lo único que transmitía era la sospecha de que si ellos dicen lo que dicen, lo hacen porque reciben algo a cambio; dinero a cambio, y no su sueldo. Se entiende del cartel porque aparecían amordazados por un billete.
Efectivamente, hay gente que sospecha eso y muchas veces esa sospecha surge de lo que escriben, de lo que dicen o de lo que dejan de decir. ¿Por qué no se puede tener esa sospecha? ¿Por qué seguir admitiendo como mi abuela que “si lo dijo la radio” automáticamente es cierto? Y si no es cierto y lo dicen, ¿Por qué no sospechar que alguien miente por un interés?
Pero eso se suma a, a ver, ayer Fernando Bravo, esto lo contó Fernando Bravo hoy en su programa, estaba haciendo una nota, termina la nota y se encuentra con la movilización en favor de la ley de medios desde el Congreso a Tribunales. Lo insultaron, lo putearon, lo maltrataron, sin agresión física. Sin agresión física, toda verbal. Se supo que Joaquín Morales Solá, Joaquín Morales Solá en dos oportunidades fue también agredido verbalmente, y hay otros hechos que todavía no trascendieron porque quienes fueron, quienes los sufrieron no quieren que esto se haga público.
Otra cagada. No se merecen ni una puteada.
No es ningún delito insultar a nadie. No es delito insultar a nadie. No es delito imprimir y pegar carteles difamatorios. No es delito.
Gracias a este gobierno.
Ahora, no todo lo que no sea delito está bien. No todo lo que no sea delito está bien. Y esto no está bien porque se está generando, tal vez a mi me costó un poco más darme cuenta, pero se está generando un caldo de cultivo, que como todo caldo de cultivo, se corre el riesgo de que de ese caldo de cultivo brote alguna agresión no verbal sino ya física.
No creo que sea que vos ahora te diste cuenta. Lo que cambió fue que en el cartel apareciste vos.
En ese caldo de cultivo, es responsabilidad de del gobierno, es responsabilidad de la oposición y es responsabilidad muchas veces de los medios. Ahora las responsabilidades no son equivalentes, porque la oposición es oposición, los medios son los medios y el gobierno es el que gobierna, así que no hay ahí responsabilidades equivalentes.
Yo no creo que TODOS sean culpables porque eso diluye la culpa. Ahora. si un particular insulta a un periodista no es culpa del gobierno, por más simpatizante del gobierno que sea ese particular. Es cierto que en la “marcha de 678” hubo varios de esos carteles, pero lo que van a tener que admitir algún día es que esa gente se AUTOCONVOCÓ. Nadie los llevó. Salieron solitos, y creo que eso es lo que más les duele.
El gobierno está empecinado en una actitud de intolerancia y está cada vez más en un comportamiento maniqueo y binario, donde todo aquel que no piense exactamente como el gobierno quiere, está del otro lado, es un enemigo. No es aliado.
Esa es una idea que han inventado algunos periodistas y que otros, queriendo o sin querer, han tomado como axioma. Pareciera que es tan evidente que no hace falta demostrar eso cada vez que lo repiten. Pero acá también caemos en que no se puede meter a todos en la misma bolsa. Por ejemplo ¿Qué tendría que hacer el gobierno con Cobos? ¿Bancarlo por más que el tipo trabaje para representar otros intereses? Es verdad que no todos son Cobos, pero por eso mismo no se puede hacer una totalidad.
¡Cuánto mejor le iría al gobierno si se dieran cuenta que eso no hace más que alejar gente que en principio está cerca, no adentro, pero cerca y con estas cosas los está alejando!.
Los que están con el gobierno, están porque quieren. Los que no están con el gobierno, es porque eso quieren. Y los que están cerca han optado por ponerse ahí. Cada cual elije donde estar. No es culpa del gobierno las posiciones que toman los que no son del gobierno. Por supuesto que me gustaría que más gente apoye al gobierno, pero no a cualquier precio.
Y además está esta actitud nefasta de la sospecha, de no tolerar, de no comprender que puede haber gente que en determinadas cuestiones, o en todas, piense distinto, y que lo haga honestamente, que lo haga por convicción. No porque alguien le paga, no porque tenga algún interés subrepticio.
¿Podés tolerar que haya gente que piensa eso? Convendría que te preguntes si no existe alguna razón para que alguien piense que eso efectivamente es así. Claro que puede estar equivocada, pero el derecho a pensar distinto no se le puede negar a nadie. Yo se que vos no defendés al periodismo en forma corporativa así que no te voy a preguntar si vos creés que todos los periodistas son honestos, porque estou segurísimo que pensás que no.
Y para terminar voy a cuestiones personales. El cartel, por si no están enterados, dice, se pregunta: ¿Se puede ser periodista independiente y servir a la dueña de un multimedio que está (me pongo los anteojos) acusada de apropiación de hijos de desaparecidos?, y aparecen las fotos de 12 periodistas que trabajan para Clarín, TN, Canal 13 o Radio Mitre, entre los cuales estoy.
Yo no te hubiese puesto. Hay otros que deberían haber estado y no están. Por ejemplo, haberlo puesto a Alfano es hacer un “mártir” de un pelotudo.
A ver. En lo personal y sobre la causa de los hijos de Ernestina Herrera de Noble hemos dado en este programa información que consideramos que vos del otro lado tenés que conocer para ir siguiendo una causa de importancia. Otros periodistas que están ahí han ido aún más allá, digo, no sólo que han informado sino que han opinado, y han opinado de manera que puede llegar a molestar a los dueños del Grupo Clarín. Puede llegar a no caer bien. Y si en algún momento la sospecha que hay sobre la dueña del Grupo Clarín se confirma, veré que es lo que hago. Por ahora es una sospecha.
De los que están en el cartel, y dejándote afuera a vos, ninguno responde a eso que describís. Morales Solá escribió una nota patética en la que describe a Ernestina como una pobre señora cuyo pecado parece haber sido dado amor a dos chiquitos. Todos los otros trabajan en Clarín y si dijeron algo parecido a lo que vos decís que dijeron, me lo perdí.
Me parece que no hace falta, pero dado que estamos en el clima que estamos voy a aclarar que históricamente me ha parecido una barbaridad la apropiación de menores, la apropiación de hijos de desaparecidos. Hemos llegado al punto que uno tiene que aclarar eso. Me he encontrado con amigos que tiene una trayectoria mucho más comprometida que la mía, mucho más comprometida que la mía en cuestiones de Derechos Humanos teniendo que justificar, mirá esto yo lo dije, yo lo dije. Teniendo que dar cartas de convicción. Mostrar, acreditar compromiso.
En tu caso no hacía falta esta aclaración. Pero vos sos vos y nadie más que vos.
Segundo. Habla ese cartel de periodismo independiente. Es cierto que uno de los sloganes publicitarios de campaña de TN es periodismo independiente. No es una palabra, no es una clasificación que a mí me convenza del todo. ¿Por qué? Porque uno siempre cobra de algún lado. Uno trabaja para alguien. Alguien le paga por el trabajo que hace. O le pagan los auspiciantes, o le paga un canal de televisión, o le paga otro canal de televisión, o le paga Clarín, o le paga Página 12, o le paga el estado, o le paga Electro Ingeniería. Alguien le paga. Uno no trabaja gratis, y en esa relación de dependencia hay dependencia. O sea lo de periodismo independiente nunca me quedó cómodo.
Otra vez: Vos sos vos y no otro. Por ejemplo, no hay programa de Gustavo Silvestre o de Santo Biasatti donde no digan que ellos son “el” periodismo independiente. Son tan in-creíbles como in-soportables.
Y ahora quiero citarle, algo que dijo... hace... anteayer, en una entrevista Página 12, Juan Miceli. Interesante porque Juan Miceli, todos lo conocen, fue durante mucho tiempo una de las caras principales de Canal 13, TN. Fue junto a María Laura Santillán la cara de Telenoche Investiga, y disconforme de cómo estaba trabajando en TN, de cómo se sentía trabajando en TN, renunció. Y pasó a trabajar a Canal 7. Es ¿desde hace cuánto Marce? dos semanas, es conductor de uno de los segmentos informativos de Canal 7.
Entonces le hacen un reportaje en Página 12 y Juan Miceli responde: "Creo más en periodista honestos que en el periodismo independiente como abstracción. Creo más en periodistas honestos". Y entiendo... comparto plenamente eso. Ahora entiendo la honestidad no sólo como aquel que hace su trabajo sin corromperse, sino también honestidad como aquel que hace su trabajo sin traicionar sus principios. Lo que se llama honestidad intelectual; no sólo no corromperse, sino tener la honestidad intelectual de respetarse a sí mismo. Respetar sus principios.
Otro Alcoyana-Alcoyana. El problema es cuando los principios de los periodistas “coinciden” con los de sus patrones, y los principios de los patrones son sólo ganar guita, en este caso con un medio periodístico, cuando no usar ese medio periodístico –y con ello a los periodistas- para defender otros negocios como la soja, la telefonía, las afjp, etc.
Y para terminar dos cosas. Me tomo otra vez de palabras de Juan Micelli. Juan Miceli dijo, o le preguntan, bueno ahora estás en la televisión pública, dijo "Pido que me juzguen por el trabajo que hago, no por dónde trabajo". Lo que me parece elemental, para Juan Micelli y para cualquier periodista. Que se lo juzgue por donde... por el trabajo que hace, no por dónde trabaja, ya sea que trabaje para el estado, para Moneta, para La Nación, para Página o para Clarín. Porque además lo dice Juan Micelli.
Efectivamente, yo no pierdo la esperanza y me gusta pensar que sos buena gente. Que respetás tus principios, y que trabajás con total libertad. Y a veces hasta se te justifica diciendo “y bueno, es buen tipo pero labura en ese lugar de mierda; algún precio tiene que pagar”. Eso en lo que respecta a vos. Ahora con los otros, yo no tengo esa consideración. Porque cuando publican algo inexacto o directamente falso, pronostican catástrofes económicas que después no se terminan cumpliendo, nunca dicen ME EQUIVOQUÉ. Entonces, convengamos que el LUGAR DONDE SE TRABAJA, sí tiene que ver con lo que un periodista dice o deja de decir, por lo que no puedo prescindir de ese dato para opinar de un periodista.
A ver, sólo un necio piensa que todos los que trabajamos en Mitre pensamos igual, sólo un necio piensa que todos los que trabajan en Clarín piensa igual. También sólo un ingenuo cree que, más allá de las diferencias en un medio, y tiene todo el derecho de tenerla porque es un medio. Ahora línea editorial de un medio no implica la uniformidad de todos aquellos que trabajan para ese medio.
Vuelvo con el vos sos vos y no otro. Vos planteaste interesantes posturas respecto a la Ley de Medios, por ejemplo, en las que se te leía a favor y lo hiciste en un blog que tenías con Tenembaum. Vos planteaste que el fútbol gratis era una buena medida, y vos –históricamente lo hiciste- te pronunciaste a favor de la Asignación Universal por Hijo. ¿Me podés contar UNA de los otros?
Y para terminar: De lo único que estoy convencido es que no voy a formar parte ni de esa lógica maniquea, ni del razonamiento binario enemigo-enemigo. Que no voy a participar de ninguna guerra, que no tengo el casco puesto, y en la medida de mis capacidades voy a tratar de respetar mis convicciones.
Espero que no tomes todas las críticas que se te hacen como parte de una guerra, porque de este lado no vi a nadie con el casco puesto, ni con armas (a pesar de lo que digan Elisa Carrió sobre los kirchneristas y el Senador Morales sobre Milagro Sala) y sólo queremos poner otra interpretación de las cosas. Siempre hay otra forma de ver las cosas. No hay ni una, ni dos: Hay muchas más. Nada impide que a esas formas de ver las cosas uno no pueda criticarlas.
Beat The Press.
Otra visión del afiche tiene Evelyn.
5 comentarios:
Concuenrdo 100%
Es increible como lo que los periodistas dicen es palabra sagrada y nada se puede decir sobre sus opiniones.
Un abrazo Cacho y gracias.
Sebastian Luro.
Está bien.
Unpoco largo, pero está bien.
Yo le hubiese pegado un poquito más.
No entiendo por qué le perdonaste la vida tanto.
Vitto.
Cacho, te saltó el putito de adentro: Te gusta el Zloto, admitilo.
Es un gorila igual que TNembaum.
Lei el otro día que rAÚL aLFONSÍN COMENTABA ENTRE SUS AMIGOS "QUE cLARÍN TE ATACABA COMO UN PARTIDO POLÍTICO, PERO SE DEFENDÍA CON LA LIBERTAD DE PRENSA..." aLE
Cuanta ENVIDIA!
Dejen de meterse con los empleados de mamá!
MONTONEROS!!!
Felipe y Marcela
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